Estadounidense vuelve a caminar gracias a la terapia con equinos

Es imposible prevenir todas las cosas que nos sucederán durante nuestras vidas. Muchas veces los accidentes están simplemente a la vuelta de la esquina y no hay nada que podamos hacer al respecto. Así fue para Talbot el año 2011, cuando caminaba tranquilamente a su universidad. En una milésima de segundo su vida cambió; aquella en la que cruzó una calle y no vio el auto que se aproximaba a gran velocidad.

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El accidente no tuvo muchas repercusiones que pudieran verse a simple vista, pero Talbot, de entonces 21 años, había quedado con gravísimos daños cerebrales. Luego de salir de riesgo vital no recordaba nada, incluso las cosas más sencillas como caminar. Desde entonces, comenzó un duro camino que consistía en volver a aprender todas aquellas cosas que nos enseñan cuando tan solo somos unos pequeños niños.

Tras el accidente, parecía imposible que su recuperación avanzara rápidamente. Entonces, tuvieron una idea: habían escuchado sobre la rehabilitación con caballos, pero no sabían mucho al respecto. Así fue como se acercaron a la organización Pegasus

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La terapia equina empezó lentamente, con una Talbot que apenas podía caminar. Un año después, los resultados han sido impactantes. ¡Talbot parece la misma que antes de ser atropellada! La chica, de ahora 23 años, puede hacer casi todo lo que hacía en el pasado. Los terapeutas y, sobre todo, la nobleza de los caballos, es lo que han logrado que la chica salga adelante a pesar de los oscuros pronósticos. 

Su madre habla emocionada de cómo el personal de la organización ha dado todo de sí para ayudar a su hija. Es increíble verla caminar de nuevo, reír y cabalgar sobre esos majestuosos caballos. "Es un sueño hecho realidad, porque cuando está sobre el caballo, se ve como la antigua Talbot. Veo a Talbot volviendo a la normalidad", dice su madre entre lágrimas. Si no lo crees, velo por ti mismo en el video a continuación (en inglés): 

A veces subestimamos el poder que tienen los animales que nos rodean. Sin embargo, cada día se confirman más terapias de distintos tipos que están basadas en animales de compañía. Caballos, burros, perros y otros fieles animales pueden ayudarnos tanto psicológica como físicamente a superar nuestras discapacidades o enfermedades. Talbot lo comprobó por sí misma, ¡y es un ejemplo de que en esta vida se puede empezar de nuevo!  

Créditos:

LittleThings

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