Perro de dieciséis años se enfrenta a un lobo para salvar a su amo

El perro Steve Mason era una cruza de husky y rottweiler, tenía las orejas suaves y el pelaje entre marrón y bronceado. Tal vez no era un perro fino, pero siempre fue un grandioso y fuerte ejemplar de la belleza canina. Y lo más importante, fue un héroe.  

Imgur/Iwillnotfearfearisthemindkiller

La dueña de Mason vivía en las montañas y estaba buscando un perro que pudiera acompañarla y protegerla en sus largas excursiones. Cuando vio a Steve Mason en medio de toda la camada, sabía que ese sería su acompañante...

Mientras los otros cachorros chillaban, gruñían y jugaban, Steve Mason caminaba en los alrededores y olía las flores. La joven estaba impresionada por su comportamiento tan relajado. Lo adoptó ese mismo día, y así empezó una relación muy especial que duró 16 años.

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Año tras año, los dos compañeros conquistaron muchas cimas y exploraron un sinfín de montañas. Cuando su dueña se cansaba, Steve Mason siempre estaba ahí para animarla. Con un perro tan fiel y fuerte a su lado, escaló montañas que nunca antes se había atrevido.

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En casa, Steve Mason disfrutaba de los placeres simples de la vida. A menudo, se pasaba horas masticando palitos y pedacitos de cartón.

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Pero hace tres años, cuando cumplió 14, Steve Mason empezó a mostrar los primeros síntomas del envejecimiento. Ya no era tan fuerte y no podía moverse como antes. Su cuerpo y sus articulaciones se atrofiaban mes a mes. 

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Cuando la dueña de Steve Mason notó que tanto su vista como su audición empeoraban cada vez más, supo que tenía que prepararse para lo peor. La idea de sacrificarlo era impensable, pero tampoco soportaba verlo sufrir.

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Pero Steve Mason no iba a partir de esa forma. 

El 5 de marzo de 2016, él y su dueña emprendieron lo que sería su última excursión juntos. El viejo perro tuvo dificultades para seguir el ritmo de la joven manada de perros que los acompañaban. No llegaron muy lejos. Simplemente, Steve Mason no podía más. Parecía ser una típica caminata mañanera, hasta que la dueña de Steve Mason notó algo muy extraño. Sintió una presencia detrás de ella y, cuando volteó, vio una silueta en el horizonte, a unos 220 metros de distancia. Era un animal y los estaba persiguiendo. 

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A principio, creyó que se trataba de una falsa percepción, pero al ver mejor el movimiento del animal, sus peores temores se hicieron realidad: ¡definitivamente, era un lobo! No habían visto ninguno en ese valle los últimos 15 años, pero este venía directamente hacia ella y sus perros. 

Corrió tan rápido como pudo y trató de conducir a la manada de cachorros de regreso a casa, pero era demasiado tarde. El lobo ya los había alcanzado con toda su furia y, en cuestión de segundos, se acercó a solo unos metros.

Era una impresionante criatura que lanzó las patas delanteras sobre la cadera de la chica. El animal estaba terriblemente delgado, ya que, obviamente, no había comido en mucho tiempo. "Él tenía miedo, pero sobre todo, estaba hambriento y, por lo tanto, dispuesto a todo", recuerda la joven.  

Y después, sin ninguna advertencia previa, el lobo los atacó. Primero arremetió contra los perros más pequeños, pero Steve Mason se interpuso en su camino de un salto. La chica se las arregló para alejar a los cachorros del lobo mientras Steve Mason peleaba contra él. Fue horrible, una batalla sangrienta en la que el viejo perro llevaba todas las de perder. Y después, la poderosa bestia mató a Steve Mason de una brutal mordida en el cuello. 

La joven estaba desconsolada. Su mejor amigo de los últimos 16 años había dado la vida por ella, y en su cabeza solo rondaba una palabra: ¡venganza!

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Pero mientras permanecía sentada viendo al lobo devorando a su presa, se dio cuenta de que su rabia no era justa. El lobo solo hizo lo que necesitaba para sobrevivir. Estaba hambriento y consiguió comida de la única forma que sabía hacerlo. ¿Por qué debería ponerse a sí misma y a los cachorros en peligro por algo tan mezquino como la venganza? Con el corazón hecho pedazos, dio media vuelta con todos los demás perritos y se dirigió a casa mientras el lobo terminaba su comida tranquilamente.  

Pocos días después, la chica vio una foto del lobo que había matado a su querido Steve Mason. Las autoridades de la zona habían sido alertadas, así que, además de buscar al animal, estaban difundiendo fotos por toda el área para advertir a los residentes de la región. 

La pérdida de Steven Mason dejó un enorme vacío en la vida de esta joven, pero ahora sabe que tuvo un final digno. Steve Mason se había ido peleando por una buena causa en lugar de desvanecerse con la edad.

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Atrapar al lobo y matarlo sería lo más normal en una situación como esta, pero esta joven logró ver las cosas desde una perspectiva diferente. Ella y Steve Manson habían vivido en armonía con la naturaleza, al igual que el lobo. La muerte de Steve Mason puede parece una tragedia, pero en realidad es la historia de un héroe que se sacrificó por un ser querido. Quizás el viejo perro sabía que esta sería su última batalla y decidió pelearla para proteger a su propia dueña y a los demás perros. Ya no está en este mundo físicamente, pero vivirá en el corazón de su mejor amiga, y su espíritu paseará por esas montañas para siempre.

Créditos:

Paw my gosh

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