Rescatan a perrita a la que cortaron el rabo de un tajo

En abril de este año alguien quedó muy sorprendido al encontrar a una preciosa cachorrita de Golden Retriever en una carretera de Singapur. Pero al levantarla del suelo, quien la encontró se llevó otra sorpresa, pero esta vez terrible. Resulta que a la perrita le faltaba el rabo y tenía un tajo donde debía estar dicha extremidad. 

Inmediatamente la llevaron al centro veterinario Barkway Pet Health, donde quedaron horrorizados con lo que le habían hecho a la perrita, a la que llamaron Shorty. Los gusanos habían infestado la zona de alrededor de donde había estado el rabo y se dirigían al coxis. Tras tratarla lo mejor posible, le dieron de alta y la encomendaron al cuidado de un refugio animal. 

Ahora el entrenador de perros  Sam Chan ha decidido publicar fotos de la preciosa perrita en las redes sociales, donde ya se han compartido más de 3600 veces. "No sé qué clase de pervertido haría algo así. Por favor, compartid y encontremos a este malnacido", comentó Sam junto a las fotos. Además, el entrenador declaró que la herida era demasiado "limpia" para ser accidental, por lo que debía de tratarse de un caso de abuso animal. 

El refugio animal Mutts and Mittens publicó el miércoles pasado un vídeo, donde se ve a Shorty muy contenta, bebiendo con ganas leche de un bol. Por el momento la recuperación de Shorty está en marcha y pronto estará lista para irse a vivir con una familia que le dé todo el cariño que se merece. Mientras tanto, la Organización Agroalimentaria y Veterinaria de Singapur está investigando el suceso, que a todas luces parece un caso de abuso. 

La violencia contra cualquier ser vivo es cruel e incomprensible y hemos de luchar para que cosas así no sucedan en el mundo. Shorty tuvo suerte y fue recogida por personas que cuidaron de ella y que la están ayudando a encontrar una familia que la quiera. ¡Gracias a Dios que aún existen personas así!