Hombre quema a su pareja con insecticida

Macarena Alba tiene 39 años, está casada y tiene 4 hijos. Dos de ellos son de una pareja que la argentina jamás podrá olvidar, un hombre llamado Matías Soljan. Macarena lo recuerda cada vez que se mira al espejo y ve las gigantescas cicatrices que tiene tanto en la cara, como en su cuello y hombros.

El día 3 de junio del año 2012, Matías, el hombre con quien había estado durante 8 años, fue a buscar a Macarena, que ya estaba acostada en la cama, para tener relaciones con ella. Ella no quería, así que se alejó y entró al baño. Cuando salió, Matías la estaba esperando con una lata de insecticida para madera en una mano y un encendedor en la otra. 

Macarena sintió su cuerpo arder y su piel quemarse bajo las llamas. Matías llamó a una ambulancia y a la policía mientras ella se revolcaba en el suelo con desesperación. Entonces, le dijo: "Tené cuidado con lo que vas a decir porque cuando vos te vas de acá al hospital yo soy el que me quedo con los chicos”. 

Durante 2 meses Macarena estuvo en coma inducido en el hospital. Se había quemado el 40% de su cuerpo, por lo que tuvieron que hacerle 3 operaciones a la semana para injertarle piel de sus piernas en su cara y cuello. Mientras tanto, la familia intentó denunciar a Matías, pero él los amenazó a todos de muerte. Cuando Macarena despertó, ella juró ante el juez que se había quemado sola por accidente. El miedo a denunciar al desgraciado la dejó paralizada.

El caso se hizo conocido en Argentina y el hombre incluso hizo una declaración de prensa denunciando persecución política:

En el video vemos cómo Matías miente descaradamente. A su lado, Macarena mira a la nada, con el cuerpo lleno de heridas.

Después del terrible ataque, Macarena volvió con Matías, asustada por sus amenazas contra ella, sus hijos y familia. Sin embargo, meses después, cuando un perito investigaba el caso, le advirtió que no mintiera con respecto a lo que había sucedido, ya que probablemente sería ese hombre quien en un futuro iniciaría sexualmente a su hija. En ese minuto, algo por fin hizo “click” en el cerebro de Macarena. Su hija mayor corría más peligro viviendo con él que en otro lugar, así que huyeron. 

Pero al poco tiempo, su hija, ahora adolescente, le confesó que ella había sido abusada por Matías desde que tenía 5 años. "Fue como en las películas, me empecé a marear y me empezó a girar todo. Me descompuse, vomité. Quería que fuera mentira”, cuenta Macarena. Y no solo eso, ya que según comportamientos y análisis posteriores, Matías también había abusado de sus otros dos hijos pequeños. 

Fue solo entonces que Macarena decidió dejar de callar y denunciar. La justicia decidió detener a Matías por abuso sexual a menores. Sin embargo, el femicidio frustrado de Macarena no pudo ser llevado ante los jueces, debido a que la argentina ya había jurado que se había quemado a sí misma.

Por suerte, el hombre ya está tras las rejas y Macarena ha podido continuar con su vida. Encontró una pareja que la respeta, la cuida y la ama, y con quien tiene un nuevo hijito. A veces es difícil alejarse de un hombre violento y parece no haber salida a situaciones tan horribles. Sin embargo, quedándose al lado de Matías, Macarena no solo ponía en riesgo su vida, sino que también la de sus hijos. Por eso, nos alegramos de que haya abierto los ojos para denunciar finalmente al hombre que casi la mató. 

Debemos evitar que este tipo de situaciones sigan sucediendo, denunciando a aquellos hombres que violentan a las mujeres y, también, criando a nuestros hijos varones con la idea de que a una mujer se la debe tratar como igual: con respeto y sin violencia. Esperamos que la vida de Macarena ahora sea feliz, alejada de toda la pesadilla que fue durante muchos años. 

Créditos:

Infobae

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