Una audaz mujer rescata a una vecina del abandono
Lucy Ashen, una señora de 39 años y madre de tres niños, ha vivido en su apartamento en Londres los últimos 21 años. Conocía a su vecina, una mujer muy vieja, solo de vista. También sabía que la anciana no tenía familiares ni nadie que se ocupara de ella.
La vecina era muy mujer excéntrica, que vivía sola en su pequeño apartamento de un dormitorio. Nunca confió en los vecinos del edificio y jamás permitió que nadie entrara en su apartamento.
Lucy también sabía que padecía algunos problemas psicológicos. Pensó que la anciana podría necesitar ayuda que no se atrevía a pedir.
Lucy trató de ganarse la confianza de su vecina muchas veces. Pero tuvieron que pasar muchísimos años hasta que la vecina se atreviera a abrirle la puerta a Lucy y dejarla entrar en su apartamento.
Lo que Lucy vio era mucho peor de lo que se había imaginado.
El piso estaba cubierto de mugre y basura. Los muebles y la ropa estaban desgarrados y llenos de agujeros.
Casi no había nada para comer en la cocina.
La viejecita ni siquiera se había dado un baño en los últimos 13 años y dormía sobre un colchón sucio que estaba en el suelo.
Lucy había visto suficiente. Con la ayuda de su hija de 14 años, emprendió la colosal tarea de limpiar el apartamento. Tiraron todos los muebles y emplearon un total de 60 horas hasta que las habitaciones quedaron razonablemente limpias.
En vista de que Lucy no tenía muchas cosas que darle, acudió a Facebook para pedir donaciones de comida, ropa, muebles y muchas otras cosas.
Lucy apenas si podía creer lo que sucedió después. Las personas que leyeron el llamado de ayuda desbordaron a su anciana vecina con donaciones muy generosas. En 24 horas, recibió el 80% de su lista.
En poco tiempo, la anciana consiguió una buena cama con sábanas limpias, bellos muebles, linda ropa nueva, tres comidas al día, y sobre todo, amigos.
Lucy y su nueva amiga ahora son muy buenas vecinas.
Es maravilloso ver que muchas personas reaccionaron con cariño y generosidad cuando una desconocida les pidió ayuda.