Perro salva heroicamente a un bebé que fue enterrado con vida
A principios de mayo, ocurrió una historia absolutamente increíble en Chongqing, una provincia china. Una mujer llamada Yang Jiali acababa de iniciar un paseo con su perro cuando, de repente, el animal se echó a correr y se dirigió directamente a los arbustos. Cuando Yang logró alcanzarlo, lo encontró tratando de cavar un hoyo desesperadamente.
Cuando se acercó y observó detenidamente qué estaba haciendo su perro, simplemente, no podía creerlo. Un bebé muy pequeño, que no tenía más de un mes, yacía en el suelo. Estaba envuelto en un paño blanco. De alguna forma, el perro detectó que se encontraba ahí.
El recién nacido estaba llorando mientras el perro trataba de liberarlo. Estaba cubierto de tierra y tenía el hocico llena de barro.
Yang desenterró de inmediato al indefenso envoltorio de la tierra, lo limpió un poco y lo llevó al hospital más cercano, donde los médicos tuvieron que actuar rápidamente para salvarle la vida al pequeño.
Después de llegar a la clínica, los médicos lo examinaron y notaron que la temperatura de su cuerpo era muy baja y los latidos de su corazón, muy lentos. Afortunadamente, lograron estabilizarlo, pero necesitaba tiempo para recuperar la salud.
La policía local y los médicos sospechaban que el bebé había sido enterrado por accidente. Creían que lo más probable era que su familia lo había dado por muerto erróneamente. En cualquier caso, es un milagro que el perro lo haya percibido y encontrado. Es la única razón por la que ahora este bebé está vivo.
Mientras el bebé se recupera en el hospital, las autoridades están tratando de localizar urgentemente a los padres de este niño. Yang se siente bendecida por haber estado en ese lugar en el momento preciso junto con su perro, y no le importa haberse llevado el susto de su vida.
Por suerte, todo salió bien al final. Es escalofriante imaginar qué hubiera sucedido sin los sensores ni los instintos de este maravilloso perro. Esperemos que encuentren a los padres de este pequeñito para que no solo pueda vivir en un hogar cariñoso, sino también tener una vida larga y feliz.