Una estrella de rugby anima a una enferma de cáncer terminal

La australiana Kia Lettice, de 22 años, lleva luchando contra un cáncer gástrico durante mucho tiempo, y le acaban de dar una mala noticia. Mientras estaba en un hospital de Sidney, le comunicaron que a pesar de la quimioterapia, el cáncer se le había extendido por todo el cuerpo y le quedaban pocas horas de vida.

Una de sus mejores amigas, Mahalia Murphy, decidió hacer algo para que sus últimos momentos fueran maravillosos.

Así que publicó en la red una petición muy descabellada e ingenua a la vez:

¡PETICIÓN URGENTE! ¿Alguna ayuda para levantarle el ánimo a mi amiga? Actualmente se encuentra en el hospital Prince of Wales y le quedan aproximadamente 4 horas de vida, porque está luchando contra un cáncer. Su sueño es que Greg Inglis o Beau Ryan la vinieran a ver. Si todo el mundo pudiera compartir esto o ponerse en contacto conmigo, se lo agradecería mucho.

Kia es una apasionada del rugby: Greg Inglis y Beau Ryan son dos de los mejores jugadores australianos de rugby, aunque hace poco Ryan se convirtió también en un admirado comentarista deportivo.

La súplica de Mahalia funcionó. Miles de personas la vieron y la compartieron. En muy poco tiempo, recibió un mensaje de respuesta que casi le provoca un infarto: Beau Ryan le escribió que estaba en camino. Llegaría al hospital en dos horas.

Cuando Mahalia le contó lo que iba a pasar, a Kia se le abrieron los ojos y sonrió por primera vez desde que le dieron el último diagnóstico. Su primo explicó: "No se perdía el programa Footy, decía que Ryan se convertiría en su marido".

Aunque el tiempo se le estaba agotando, en ese momento sentía que estaba en la luna.

La foto que publicaron después en Facebook recibió más de 10.000 likes en pocas horas, junto con cientos de cálidas felicitaciones y buenos deseos. Y la historia no termina aquí.

Kia sobrevivió todas esas horas y el día siguiente.

Podría parecer muy poco, pero ella y sus seres queridos están disfrutando de cada instante que pasan juntos. Es impresionante la fuerza que alguien más te puede dar y lo lejos que puedes llegar con un poco de motivación.

Una respuesta positiva y una amorosa atención no solo mueven montañas, sino que también te mantienen vivo, incluso si solo es por un par de horas más.