Se queda con el dinero de un ciego y este chico hace algo increíble
¿Qué harías si vieras a alguien haciendo algo que está mal? ¿Algo que es injusto? ¿Le darías su merecido, o simplemente harías como si no hubieras visto nada? Cuando el chico de 19 años Joey Prusak, de Hopkins (Minnesota, EE.UU.), vio que una mujer se quedaba con un dinero que no era suyo, decidió hacer algo. Y si no llega a ser por un email anónimo, nunca jamás nos habríamos enterado de su historia.
Joey trabaja en una de las franquicias de la cadena de comida rápida "Dairy Queen". Estaba teniendo un día normal en el trabajo hasta que un hombre ciego se acercó para pedir. Al ir a pagar, se le cayeron 20 dólares del bolsillo. Lo que hizo después la mujer que había detrás del hombre, hizo que otro de los clientes que había en el local en ese momento mandara este email días más tarde explicándole a la jefa de Joey lo que presenció:
"Fui a su tienda el día 10 de septiembre alrededor de las 13 durante la hora del almuerzo. Estaba haciendo cola mientras uno de sus empleados atendía a un señor. Me di cuenta de que el señor estaba ciego o parcialmente ciego. Cuando se dio la vuelta, vi cómo se le caían 20 dólares al suelo. La anciana que estaba delante de mí los recogió y, en vez de devolvérselos, los metió en su monedero. Tanto ella como todos los que estábamos en la tienda sabíamos que el billete se le había caído al hombre cuando intentaba encontrar su bolsillo para guardarse el cambio. Antes de que pudiera decirle nada, su empleado se me adelantó. De forma educada, le pidió que le devolviera el dinero al señor. Ella dijo que era su dinero. Su empleado volvió a decirle que lo devolviera a su legítimo dueño. Ella volvió a negarse. Entonces, le pidió que abandonara la tienda, ya que no iba a atender a nadie tan desconsiderado como ella. Entonces, ella se enfadó muchísimo y empezó a insultar a su empleado. Él se mantuvo calmado; le volvió a pedir que abandonara la tienda. Al final, la señora se marchó de la tienda sin devolver el dinero.
Llegó mi turno de pedir. Su empleado se mantuvo tranquilo, me saludó con educación y me pidió disculpas por el incidente que acababa de suceder. Le dije que había hecho lo correcto y que yo mismo vi cómo el dinero se le caía al hombre ciego. Cuando me dieron mi pedido, me senté cerca de donde estaba sentado el hombre ciego al que se le había caído el dinero. Entonces, su empleado apareció. Nunca habría esperado lo que pasó después.
Su empleado se acercó al hombre, agarró su cartera y dijo: 'Señor, en nombre de Dairy Queen, me gustaría darle los 20 dólares que se le han caído al suelo cuando se alejaba de la caja. Sé que no son los mismos 20 dólares que perdió porque la señora los ha robado, pero aun así tienen el mismo valor'. Entonces, el hombre comenzó a darle las gracias por darle su propio dinero.
Me quedé en shock cuando vi la generosidad de su empleado, que sacó su propio dinero de su cartera para dárselo a un cliente porque una mujer decidió robar algo que no era suyo. Antes de irme, le pregunté su nombre a su empleado: me dijo que se llamaba Joey.
Como cliente de su tienda y de la cadena Dairy Queen me gustaría decirle con orgullo que el gesto de Joey me ha convertido en un cliente suyo de por vida. Gracias por un servicio excelente y por una experiencia aún mejor".
¡Sin duda, esta jefa puede estar orgullosa de su empleado!
Aquí tienes la historia de Joey completa (en inglés):