Mejores amigos descubren que son hermanos. ¡Asombroso!

Georgia Bond, de Liverpool (Reino Unido), siempre ha sabido que fue concebida mediante fecundación in vitro, pero nunca había tenido ningún tipo de información sobre su papá. Hasta el día de hoy.  

Hace años, Georgia conoció a Jack, un chico que, como ella, también había nacido mediante fecundación in vitro y tampoco sabía quién era su padre biológico. Esto los hizo crear un lazo de amistad que difícilmente se podrá romper. Los dos adolescentes se convirtieron en amigos inseparables.

Y llegó el día del 18 cumpleaños de Jack y con él... llegó un momento especial. Y es que los niños nacidos mediante esta técnica de reproducción asistida tienen derecho a pedir el nombre del donante una vez superan la mayoría de edad. Jack no lo pensó dos veces y solicitó sus datos a la clínica. Los resultados no tardaron en llegar: ahora sabía el nombre de su papá, pero también descubrió que tenía una hermana que había nacido en 1998. 

Cuando Georgia se enteró, corrió a la clínica. ¡Ella había nacido en 1998! ¿Quizá Jack y ella tenían el mismo padre? ¡Ese había sido el sueño de estos dos amigos desde hacía años! Y cuando los resultados llegaron, por fin se hice realidad: no cabía duda de que Georgia y Jack eran hermanos, efectivamente, sus madres se quedaron embarazadas del mismo donante. 

En esta foto se puede ver la cara de felicidad de dos amigos que, en realidad, siempre se habían comportado como hermanos y, aunque no tenían pruebas que lo demostraran, sabían que había algo muy poderoso que los unía. "Soy la persona más feliz del mundo. A todos los que han nacido por fecundación in vitro: pedid vuestros datos. Es lo mejor que he hecho nunca. Los milagros existen", dice Georgia. ¡Y tanto que existen! 

Créditos:

Little Things

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