Rescatan a un perro casi ahogado por su propio pelo en Rusia

Al entrar en un apartamento en la ciudad de Novosibirsk, Rusia, los voluntarios de una protectora de animales se encontraron con una visión atroz. En el aire flotaba un terrible olor a heces. En ese momento descubrieron a un animal al que no podían identificar, que parecía moverse con lentitud. Pero, ¿de qué demonios podía tratarse?

Lo que a primera vista parecía un grotesco monstruo de una película de terror era en realidad un perro de la raza Bobtail terriblemente descuidado. Aproximadamente un año antes, el dueño del animal, Gore Zhdanov, un hombre de 79 años, había fallecido. Pero en lugar de encontrarle un nuevo hogar al perrito, sus parientes lo abandonaron a su suerte en el apartamento. 

Tan solo se ocupaban de las necesidades básicas del animal: comida, agua y acceso a la terraza para hacer sus necesidades. Pero hasta ahí llegaba el cuidado que le daban estas negligentes personas al pobre animal. Lo único que les preocupaba era dividir la herencia de su pariente fallecido. Mientras las discusiones se alargaban, decidieron dejar encerrado al perro en el piso para que protegiera los bienes. 

Cuando finalmente llegaron a un acuerdo, decidieron vender el apartamento y llamaron a una protectora de animales para que se llevaran al perro. 

El animal apenas podía moverse bajo el peso de su propio pelo. Cubierto de sus propias heces y orina, el olor que desprendía era horrible. Las 6 personas que se encargaron de liberar al apenas reconocible animal de su enmarañado y sucio pelo tardaron 3 horas en acabar su tarea. 

Bajo la gruesa capa de pelo, estas personas vieron horrorizadas numerosos forúnculos y heridas. Al finalizar la sesión de aseo que tanta falta le hacía, los veterinarios habían llenado 4 bolsas de basura con una capacidad de 100 litros de pelo. Y puesto que los parientes del dueño desconocían el nombre del animal, los que lo rescataron le pusieron el nombre de Cococs.

Cococs ha encontrado ya un nuevo hogar. Elena Rivvo, su nueva dueña, le ha impuesto una dieta especial para que recupere su salud y fuerza. Elena está familiarizada con esta raza de perro, por lo que Cococs no volverá nunca a sufrir un descuido igual. Ningún animal merece un trato así y es de esperar que las personas que lo abandonaron a su suerte reciban el castigo que se merecen por su egoísmo. 

Créditos:

Dailymail

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