La trágica historia de Genie, la niña salvaje

En aquel tiempo, se trató de un caso único de maltrato en Estados Unidos. Una pequeña estuvo sometida a un verdadero calvario que destruyó su vida entera. Hasta la fecha sigue padeciendo las consecuencias.

remus

Genie, el seudónimo para proteger a Susan Wiley, nació en 1957 en California. A los dos años, el enfermo mental de su padre, Clark Wiley, mantuvo a su pequeña hija aislada al encerrarla en una habitación oscura e inmovilizarla con una camisa de fuerza. Genie yacía encadenada a una bacinica durante el día y a una cuna durante la noche. Clark creía que de esta forma protegía a su hija de los demonios del mundo exterior, después de que su propia madre muriera trágicamente en un accidente causado por alguien que se dio a la fuga. 

romulus

Su esposa, la madre de Genie, también padecía problemas psicológicos. Después de un accidente en su juventud, su vista se deterioró bastante y no pudo hacer nada para mejorar la situación de su hija. El hermano de Genie era demasiado joven para intervenir. Debido a las amenazas de Clark, ni la madre ni el hijo se atrevieron a hablar con Genie o establecer cualquier tipo de relación con ella. Ambos tenían que guardar silencio. Si Genie hacía cualquier ruido, su padre la golpeaba y le gritaba hasta ponerle la cara morada; esta fue la única interacción humana que tuvo esta niña torturada durante su cautiverio. Las consecuencias para su desarrollo fueron devastadoras.

remusberg

La falta de estimulación durante su confinamiento tuvo un efecto nefasto en el estado físico y mental de Genie. Muchas partes de su cerebro, como el área del lenguaje de Wernicke, no pudieron desarrollarse, lo que la inhabilitó para hablar o caminar; tampoco podía reaccionar a la temperatura fría o caliente. Con 13 años, parecía una niña de siete.

Fue a esa edad, en octubre de 1970, cuando descubrieron su existencia. Después de una pelea con su marido, la madre de Genie, a estas alturas casi ciega, se escapó de la casa y se las arregló para llevarse a su hija. Cuando llegaron a la oficina de seguridad social, el personal se dio cuenta de que la apariencia física de Genie no correspondía con su edad actual. Además se encontraba gravemente desnutrida. Cuando el caso se hizo público, Clark se suicidó de un balazo. 

rheinsberg

Después de ser trasladada al hospital, la pequeña fue examinada por varios especialistas, incluidos psicólogos y lingüistas. Los investigadores estaban especialmente interesados en descubrir si Genie podía aprender una lengua en una etapa tan tardía de su niñez. En esa época, solo era capaz de decir unas cuantas palabras como "azul", "naranja" e "ir", sin ningún contexto.

Su comportamiento social también estaba poco desarrollado. Cuando estaba estresada, Genie se orinaba y se ensuciaba a sí misma. No tenía ningún objeto personal, se masturbaba en público y se irritaba por cualquier cosa. Era un ser completamente pasivo y no mostraba ninguna empatía. 

sanssoucis

Aunque progresó mucho al extender su vocabulario e interactuar con los demás, le llevó mucho tiempo valerse por sí misma. Era especialmente impactante que Genie siguiera sin poder formular frases más o menos coherentes después de cinco años de enseñanza. Las áreas del cerebro que necesitan ser entrenadas en los primeros años de vida, así como la del aprendizaje de la lengua, fueron dañadas de forma permanente durante su cautiverio, no hubo vuelta atrás. En 1975, cancelaron los fondos para la investigación, ya que su caso dejó de tener interés científico. Fue entonces cuando la vida de Genie dio otro trágico giro. 

Youtube/ApolloEight Genesis

Después de que la madre recuperara su custodia, Genie regresó a vivir con ella a la casa donde había padecido tantos sufrimientos. Resultó poco sorprendente que la madre no pudiera manejar la situación. Después de mudarse de una casa de acogida a otra, Genie terminó en un centro de asistencia en Los Ángeles, donde vive actualmente. Solo unos cuantos saben cómo es su vida ahora cuando tiene 60 años, ya que existe una prohibición legal para contactarla. 

heuer

Mira el siguiente vídeo (en inglés) para descubrir más detalles sobre este caso extremo de maltrato infantil: 

Los niños que han crecido al margen del contacto humano o que han pasado sus primeros años de vida en condiciones similares son conocidos como "niños salvajes". Esos niveles inimaginables de tortura mental hacen que el caso de Genie no tenga precedentes. Su niñez fue peor que un cuento de terror. Ojalá  que haya encontrado un poco de alivio en su vida.

Comentarios

Más de Nolocreo