La conmovedora historia de "la niña de piedra" y su enfermedad única

La siguiente historia es muy entrañable y nos invita a la reflexión. Se trata de una valiente y joven madre, Stefania, y su pequeña hija, Bea. Cuando Stefania se quedó embarazada hace algunos años, ella y su marido se sentían en las nubes. Ambos padres irradiaban felicidad por el nacimiento de su primera hija. 

Since quel giorno che i nostri sguardi si sono la prima volta incontrati io dopo pochi secondi ero già Perdutamente ...

Pubblicato da Il mondo di Bea su  Martedì 6 giugno 2017

Cuando Bea nació, parecía una bebé perfectamente sana. La vida de la familia marchaba sobre ruedas, y la pareja disfrutaba de las alegrías y trataba de resolver de la mejor manera los retos de la paternidad primeriza. Pero un día, cuando Bea tenía unos 7 meses, sucedió algo muy extraño. Stefania la estaba bañando cuando, a pesar de sus precauciones, Bea se rompió una muñeca de repente. Alarmada, Stefania llevó a su bebé de inmediato al médico, y cuando escuchó la respuesta que estaba buscando, el mundo se le vino encima: los médicos no sabían qué tenía su bebé, solo pudieron concluir que padecía una enfermedad extremadamente rara, única, de la que no se conocían otros casos. Dicho trastorno provocaba la calcificación en las articulaciones de Bea. El pronóstico: la pequeña quedaría paralítica en poco tiempo, como una estatua viviente. Empezaron a referirse a ella como "la niña de piedra".

A partir de ese momento, parecía como si un terrible destino se posara sobre la felicidad de esta familia. Poco después del devastador diagnóstico de su hija, Stefania descubrió que tenía un tumor. De repente, la joven madre se encontró librando una batalla en dos frentes: luchaba contra su enfermedad y la de su hija. A pesar de su propio padecimiento, Stefania hizo todo lo que pudo para que la vida de su hija fuera lo más feliz posible. 

Además creó una página web y una asociación para colaborar con la investigación sobre la extraña enfermedad de Bea. 

En el transcurso de los años, Stefania, su marido y Bea han recibido el apoyo y el cariño no solo de su familia, amigos y comunidad, sino de gente completamente desconocida que se ha conmovido al enterarse de su historia, tanto en su Italia natal como en otras partes del mundo. 

Por desgracia, Stefania, esta mujer increíblemente fuerte y aguerrida, falleció hace poco. Reconocemos su extraordinaria capacidad de lucha como mujer y como madre, y le enviamos nuestras más profundas condolencias a su familia. 

Bea todavía necesita ayuda; es importante conocer su historia, mantener un debate abierto sobre su enfermedad y seguir investigándola. Hay que recordar que la vida, incluso en sus peores momentos, es un regalo muy valioso que deberíamos apreciar con una sonrisa. 

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