Líder de campamento mató a niños durante 20 años

Advertencia: el siguiente artículo contiene temas e imágenes que podrían ser sensibles para algunos lectores. 

Algunos aspectos de la naturaleza humana son inexplicables. Hay gente que de verdad siente placer al ver a otros sufriendo mientras los torturan. El ruso Anatoly Slivko fue uno de esos monstruos. 

En la superficie, Anatoly era un marido cariñoso y padre de dos niños. Pero en su interior, su familia nunca le interesó. En 1961, Anatoly fue testigo de un terrible accidente de tráfico en el que un niño de escuela sin uniforme fue arrollado por un vehículo. Profundamente afectado por lo que vio, Anatoly no se pudo sacar de la cabeza la imagen del cuerpo desangrado y sin vida del niño. Extrañamente, esta escena lo excitó como nunca otra escena lo había hecho antes. 

Visto como un miembro respetado de la comunidad, Anatoly era el líder de un club de niños llamado "Chergid". Todos los niños de la ciudad soñaban con ser miembros del club. Los padres nunca se sintieron preocupados por dejar que sus niños hicieran senderismo, acamparan o se fueran de excursión con Antaloly, tal era la estima que suscitaba en su ciudad. Muchos de los niños se lo pasaban como nunca en el campamento; nadie pensó ni por un segundo que Anatoly les fuera a hacer daño a alguno de ellos. 

En realidad, Anatoly no era para nada una figura parental respetable. Cada año, el líder del campamento seleccionaba a uno o dos niños e intentaba ganarse su confianza. Les habló sobre una película de guerra que quería grabar en el bosque y los convenció de que fueran con él. Para satisfacer sus deseos, Anatoly incluso ató y torturó a los "prisioneros" en algunas de las escenas. Como tenían una relación tan estrecha con Anatoly, los niños no compartieron con nadie lo que había pasado ese día en el bosque. 

Además de estas grabaciones, Anatoly también llevó a cabo experimentos en algunos niños; decía que les ayudaría a relajarse. Uno de estos experimentos consistía en colgar a los niños hasta que quedaban inconscientes. Aunque Anatoly prometía reanimarlos rápidamente, algunos de los 43 niños que pasaron por esta tortura no sobrevivieron. 

Siete de los niños a su cargo murieron durante estos experimentos. Entonces, uno de los niños les habló a sus padres sobre estos experimentos y la policía empezó a investigar a Anatoly. Habían pasado más de 20 años desde su primer asesinato. Cuando registraron la casa del club, los oficiales de policía encontraron varias grabaciones, los zapatos de una de sus víctimas y muchos otros "souvenirs" que Anatoly se guardó para recordar a sus víctimas. 

El desacredito líder del campamento fue sentenciado a muerte por asesinar a siete niños, abusar sexualmente de otros 7 y cometer necrofilia; fue ejecutado en septiembre de 1989. Sin embargo, durante su juicio muchos niños llegaron a expresar que habían disfrutado mucho los días en el campamento con él. Sus padres siempre estaban demasiado ocupados para encargarse de ellos y los niños habían vivido muchas aventuras con Anatoly. Para ellos, Anatoly siempre les había ofrecido su tiempo y habían hecho todo lo que ellos querían con él. 

Anatoly solo estaba interesado en satisfacer sus deseos sexuales más profundos. Al traicionar la confianza de su comunidad de una forma tan horrible, se convirtió en uno de los asesinos más famosos de la Unión Soviética. Un verdadero monstruo. 

Créditos:

Youtube

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