Niña rusa pasa semanas sin comer ni beber por estar durmiendo
Todo le iba bien a Alexandra Metelkina hasta hace un año. Como todos los padres amorosos, esta mamá rusa disfrutaba viendo a su angelito dormir serenamente en la cuna. Pero un día, su vida feliz se transformó en una pesadilla.
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Aquel día empezó como cualquier otro para la bebé de apenas seis meses de edad. Anya desbordaba energía. Cuando Alexandra la acostó en su cama después de la comida, la niña se quedó muy tranquila de repente. Al principio, la joven madre se puso muy contenta de que Anya se hubiera quedado dormida con tanta facilidad.
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Pero Alexandra empezó a preocuparse cuando su hija siguió durmiendo profundamente varias horas después. Por lo general, Anya se despertaba con cualquier ruido, por mínimo que fuera. Sin embargo, la niña continuó dormida todo el día y toda la noche, ni siquiera despertó a la mañana siguiente. Profundamente preocupada, Alexandra trató en vano de despertar a la pequeña, pero Anya no se movió ni abrió los ojos.
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Para entonces, la joven madre ya era presa del pánico. Temiendo que su hija hubiera caído en coma, llamó a los servicios de emergencia. Aunque el médico no pudo despertar a Anya de su sueño, llegó a la conclusión de que, por lo demás, se encontraba en buen estado de salud. Los especialistas que la examinaron en el hospital tampoco hallaron explicación alguna a su enfermedad.
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Por fin, una semana después, Anya despertó como si nada hubiera ocurrido. Exámenes posteriores mostraron que no padecía ninguna anormalidad y que se hallaba libre de enfermedades. No obstante, después de que la madre y su bebé regresaran a casa, se presentó el mismo problema a la mañana siguiente. ¡La pequeña no despertó!
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Ahora, casi un año después, madre e hija se han convertido en visitantes regulares del centro médico. Cuando despierta, la niña tiene una energía desbordante. Pero tan pronto como Anya cierra los ojos, cae en un sueño profundo. Algunas veces, incluso duerme durante varias semanas sin comer ni beber nada. Entonces, su temperatura corporal disminuye considerablemente. Al despertar, tiene la cara roja, escalofríos y fiebre alta. Los doctores todavía no han logrado determinar la causa de su hipersomnia.
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En el siguiente vídeo (en ruso) podrás obtener más información sobre la increíble historia de Anya:
Oficialmente, Anya padece "hipersomnia de causa desconocida". Aunque los síntomas son similares a los del síndrome de Kleine Levin, también conocido como el síndrome de la bella durmiente, la niña no ha respondido favorablemente a ningún tratamiento. Sin embargo, los doctores tienen la esperanza de que Anya pueda llevar una vida normal en el futuro. Les deseamos a Alexandra y a su hija todo lo mejor en el camino que tienen por recorrer. ¡No pierdan su fuerza interna!