Un joven víctima de 'bullying' se quita la vida a los 20 años

El acoso escolar es un problema muy grave, y nunca debe tomarse a la ligera. Por lo general, nos enteramos de casos en los institutos, pero este tipo de hostigamiento también puede tener lugar entre estudiantes universitarios.  

Esto es lo que le pasó a Adrien Gorget. Su familia se puso en contacto con nosotros para que pudiéramos honrar su memoria.

Adrien fue un niño curioso, un adolescente estudioso y un joven brillante y deportivo. Parecía que nada le impediría triunfar en la vida.

Después de graduarse del bachillerato con honores, su sueño se convirtió en realidad: fue aceptado en una universidad de ingeniería de mucho prestigio. Siempre le había fascinado la aeronáutica  y quería convertir su pasión en una exitosa carrera al convertirse en un ingeniero aeroespacial.

En 2013, empezó a estudiar en la reconocida universidad con la esperanza de tener un futuro brillante.

Facebook / Monik Gorget

Pero muy pronto, Adrien se convirtió en el objetivo de una agresiva persecución, y no se trataba solo de las típicas novatadas que se llevan a cabo en muchos campus universitarios. Era víctima de una violencia recurrente, y cuando le dañaron el coche, decidió romper el "código de silencio" y reportar el hecho ante la policía. 

Facebook / Monik Gorget

A partir de ese momento, Adrien tuvo que aislarse. Las represalias por haber reportado el delito fueron terribles. Para escapar de todo eso, Adrien solía recorrer largos trayectos en bicicleta y, en solo cinco meses, acumuló 4345 kilómetros.

Para entonces, se encontraba en el tercer año de universidad, y su vida se había vuelto extremadamente difícil. Su familia hizo todo lo posible para apoyarlo. 

Debido a que la fecha del juicio contra el estudiante que dañó el coche de Adrien se acercaba, este empezó a temer la venganza que estaba seguro de sufrir. Adrien tenía mucho miedo y estaba desesperado. Al sentirse abandonado por sus compañeros estudiantes y por los administradores de la universidad, solo encontró una salida. Con solo 20 años, Adrien se suicidó.

En su carta de despedida expresa claramente que la universidad es responsable de la tragedia. 

Este es el conmovedor vídeo, en francés, que la familia de Adrien realizó en su honor: 

Por desgracia, el de Adrien no es un caso aislado. El acoso escolar o bullying es un fenómeno muy extendido que destruye vidas, y es importante para todos nosotros aprender a detectarlo  para ponerle un alto. 

Tenemos que hablar abiertamente acerca del acoso escolar y romper el tabú para poder ayudar a las víctimas y hacer entender a los perpetradores la magnitud de  sus crímenes. Cuanto más informada esté la gente sobre este problema, hay mayores posibilidades de erradicarlo de una vez  por todas.

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