Madre salva a sus hijas de un incendio metiéndolas dentro de un pozo
Hay un país ubicado casi al fin del mundo que se caracteriza por los desastres naturales que lo azotan cada año. Terremotos, tsunamis o volcanes en erupción destruyen y cobran vidas ante una población cansada de perderlo todo, pero también extrañamente optimista frente a cualquier adversidad. Y no, no estamos hablando de Japón. Esta vez estamos hablando de Chile.
El año 2017 ha vuelto a dejar su estremecedora huella en el país andino: inmensos e incontrolables incendios forestales han afectado la zonas centro y sur durante los meses de enero y febrero. El verano no ha tenido piedad alguna y ha registrado las temperaturas más altas de la historia de Chile, lo que junto con los fuertes vientos y la negligencia humana han tenido como consecuencia la pérdida de casi 600.000 hectáreas de bosque nativo y poblados rurales, además de la vida de 11 personas, en su mayoría bomberos o habitantes de las zonas afectadas.
Sin embargo, en medio de cualquier catástrofe siempre suceden cosas que nos dejan con la boca abierta. Esta vez no fue la excepción: la historia de una familia de la comuna de Hualqui, a solo unos cuantos kms de la ciudad de Concepción, está dando la vuelta al mundo.
Hualqui, como tantos otros sectores del país, fue incinerado hasta el último escombro. La casa de Silvana García y su familia sufrió el mismo destino: el fuego cercó el terreno y empezó a pisarles los talones. El peligro acechaba a tan solo unos cuantos metros y los había dejado sin escapatoria. Carlos, su esposo, intentaba combatir las llamas ahogándolas con tierra, pero era tan inefectivo como intentar tapar el sol con un dedo.
Entonces, Silvana tuvo una idea. Tomó una cuerda y les pidió a sus dos hijas que la acompañaran al pozo con agua del patio. Cuando estaban allí, las hizo bajar una a una con ayuda de la cuerda y meterse al agua. El pozo medía casi 3 metros de alto, pero, de alguna forma, Silvana logró taparlo con planchas de zinc para evitar que las llamas entraran. Y así esperaron...
Casi dos horas pasaron encerradas allí, en la oscuridad y humedad del pozo, mientras en el exterior todo se incendiaba a temperaturas cercanas a los 1000 ºC. Carlos, por su parte, no vio adónde se habían ido las mujeres y, cuando todo se hubo calmado, empezó a buscarlas con desesperación.
Así fue como oyó ruidos provenientes de dentro del hoyo. Cuando se acercó a él, descubrió lo que había sucedido y la sorprendente hazaña de Silvana. Ayudó a las tres mujeres a salir a la superficie, donde contemplaron con horror las devastadoras consecuencias del incendio: su casa, sus plantaciones y sus animales habían sucumbido al fuego. Pero lo más importante había logrado permanecer con vida: su propia familia.
Esta es solo una de las increíbles historias que han rodeado los incendios de Chile este fatídico verano. Silvana y Carlos no olvidarán jamás la tragedia que casi acaba con sus dos hijas, y tendrán que trabajar arduamente para recuperar todo lo que les fue arrebatado. El futuro que les espera no es alentador ni sencillo pero, al menos, es uno en el que pueden permanecer juntos.
En este video puedes ver más sobre la historia de Silvana y Carlos:
Esperamos que las personas afectadas puedan recuperarse pronto de esta tragedia y que Chile, nuevamente, tenga la fuerza suficiente para volver a ponerse de pie.