Madre salvó a su familia de un incendio con una ingeniosa idea
La londinense de 39 años Natasha Elcock vio la muerte muy de cerca la madrugada del pasado miércoles. Y no solo su vida fue la que estuvo en peligro, sino también la de toda su familia: su hija de 6 años y su novio.
Vivían en la planta número 11 de la Torre Grenfell, un edificio de 24 plantas de viviendas sociales situado al noroeste de Londres. La pesadilla de la familia comenzó cuando el miércoles su edificio se vio envuelto en llamas en mitad de la noche. Los bomberos llegaron al bloque de pisos y le ordenaron a Natasha y su familia que permanecieran en el interior del apartamento. Obedecieron, rezando para que las llamas no llegaran hasta ellos, esperando que el fuego no fuera lo último que vieran en sus vidas.
Una hora y media después, los bomberos volvieron a ponerse en contacto con ellos: ya podían salir. Corriendo, se aproximaron a la puerta que les daría la libertad, pero... no pudieron abrirla. "Tratamos de abrir la puerta, pero no pudimos, porque estaba demasiado caliente. Ardía", cuenta Natasha. Estaban atrapados.
Desesperada, Natasha buscó la manera de mantenerse a salvo hasta que alguien pudiera ayudarlos. Y entonces, miró a los grifos de su casa y lo tuvo claro: la mujer abrió todos los grifos del baño y dejó el agua correr hasta que el baño se inundó y el agua llegó al resto de la vivienda. Después, buscaron la habitación más fría y se acurrucaron en el suelo mojado. Y esperaron. "La puerta estaba cediendo, las ventanas resquebrajándose. estábamos aterrados", recuerda Natasha.
A las 3 de la madrugada (2 horas después de recibir el aviso de incendio), los bomberos llegaron hasta su puerta y la pesadilla de la familia terminó. Gracias a una ingeniosa madre que luchó por aferrarse a la vida cuando todo parecía estar perdido.
Natasha Elcock: London Tower Inferno Survivor Shares Miraculous Escape https://t.co/IcY3jvDkEF pic.twitter.com/hc5gzqhmXu
— Answers Africa (@AnswersAfrica) 15 de junio de 2017
La historia de Natasha y su familia tiene un final feliz. Sin embargo, otras personas que vivían en el edificio no han tenido la misma suerte. Por el momento, se sabe que 30 personas han muerto, y hay decenas de heridos y desaparecidos. La policía investiga qué es lo que pasó y los equipos de rescate buscan a supervivientes entre los escombros. Una verdadera tragedia que todas las víctimas recordarán de por vida.