Una joven pierde las yemas de 3 dedos tras un intento de suicidio
ADVERTENCIA: Este artículo contiene imágenes que pueden herir la sensibilidad de algunos lectores.
La adolescente australiana Elle Lietzow y su familia han pasado por momentos muy duros debido a la anorexia nerviosa que la joven ha padecido. Como ya publicamos en diciembre de 2015, el desorden alimenticio de Elle la dejó con un peso de 36 kg y casi le costó la vida. Pero Elle pareció haber superado por fin su desorden alimenticio y llevaba una vida saludable.
Cuando Elle descubrió los beneficios de la dieta vegana, la adolescente, otrora obsesionada por las calorías, se convirtió en una apasionada chef. La chica volvió a descubrir la pasión por la comida e incluso publicó su experiencia con la enfermedad y su recuperación, junto con algunas deliciosas recetas, en diferentes redes sociales. Tras conmover a muchas personas con su historia y deleitar los paladares de otras tantas con sus recetas, pronto consiguió un gran número de fans y seguidores.
Pero, por desgracia, la depresión e inseguridad que provocaron su desorden alimenticio en el pasado no desaparecieron una vez que su peso volvió a la normalidad. Elle estaba preocupada por su futuro y se sentía como un fracaso. Se llegó a convencer de que era una carga para su familia y amigos; pensaba que todos estarían mejor sin ella.
Una mañana del pasado marzo, tras una discusión con su madre y hermana, Elle sintió que la presión que le imponían para ser "normal" era demasiado para ella. Desesperada, tomó un gran número de pastillas y los mezcló con alcohol. Por suerte, sus padres la encontraron antes de que fuera demasiado tarde; en su cama, inconsciente.
Los médicos intentaron desesperados estabilizar la circulación de Elle y evitar que la falta de oxígeno le dañara el cerebro. Cuando la presión sanguínea le bajó de repente, tuvieron que inducirle un coma para salvarle la vida.
Los médicos pudieron salvarle la vida, pero Elle tuvo que pagar un precio por ello. La fuerte medicación que necesitaron para subirle la presión sanguínea terminó provocándole un horrible efecto secundario: la circulación de las yemas de tres de sus dedos era demasiado débil y, como consecuencia, las perdió.
El tejido de las yemas de los dedos había sufrido una necrosis, que hizo que ennegrecieran y se secaran. Un tiempo después, las células muertas cayeron y tuvieron que coserles los dedos.
En mayo de 2016, Elle habló públicamente sobre su intento de suicidio y las terribles consecuencias que tuvo para su salud. La chica estaba por entonces bastante deprimida, pero en agosto de este año volvió a grabar un vídeo mientras estaba ingresada en el hospital y le quitaban los puntos de los dedos. En este vídeo se la veía de mucho mejor ánimo.
Elle explicó en su vídeo que le iban a poner prótesis en los dedos. Piensa que tuvo mucha suerte al sobrevivir al intento de suicidio y al no sufrir ningún daño cerebral como consecuencia de este. Ahora ha encontrado el coraje necesario para seguir adelante y enfrentarse a los problemas psicológicos que la llevaron a intentar acabar con su vida.
Aquí puedes ver un vídeo de cuando le quitaron los puntos a Elle:
Elle está profundamente agradecida por que su momento de desesperación no terminara tan mal como hubiera podido hacerlo. La vida le ha vuelto a dar otra oportunidad. Con suerte, ella y su familia se mantendrán fuertes y podrán afrontar el futuro con entereza. Después de todo, donde hay vida, siempre hay esperanza.